“Campaña de Derechos Humanos” contra Cuba

La “Campaña de Derechos Humanos” contra Cuba

Por Cliff DuRand

Investigador Asociado, Centro para la Justicia Global
www.globaljusticecenter.org

Miami y Nueva Jersey son las bases para los cubano-estadounidenses
anticastristas más acérrimos. Harían cualquier cosa para dar lugar a
un cambio de régimen en Cuba y por 50 años han contado con el apoyo
del gobierno de los Estados Unidos. Aún pueden contar con tal apoyo si
bien el sentimiento dentro de la comunidad cubano-estadounidense ha
abandonado la posición de línea dura. Cada vez que una nueva
administración asume en Washington, crean una vía para que cualquier
acercamiento con La Habana sea prácticamente imposible. Por ejemplo,
al inicio de la presidencia de Bill Clinton temían un entibiamiento de
las relaciones con Cuba. Para prevenirlo crearon un incidente. Los
aviones de “Hermanos al Rescate”, con base en Miami, sobrevolaron La
Habana, distribuyendo panfletos anti-Castro. Las autoridades cubanas
les lanzaron una advertencia a ellos y a las autoridades
estadounidenses diciendo que ésta era una violación de la soberanía
aérea. ¡Imaginen que hubiera ocurrido si aviones cubanos hubiesen
hecho lo mismo sobre Washington D.C! Bueno, Cuba respondió de la misma
manera. La siguiente vez que tres aviones de Hermanos al Rescate
entraron el espacio aéreo cubano, dos de ellos fueron derribados. Esto
hizo que la administración de Clinton se viera en la necesidad
política de adoptar una línea dura contra Cuba y se promulgó la Ley
Helms-Burton. Misión cumplida.

Ahora estamos ante un escenario similar bajo la administración de
Obama. En el temor de que la nueva administración pudiera cumplir su
promesa de entablar un diálogo con líderes con los cuales EE.UU. tiene
sus diferencias y ante su compromiso de respetar la independencia de
otros países en el hemisferio (en un momento en el cual todos están
pidiendo que los EE.UU. cesen el embargo sobre Cuba) la mafia de Miami
se dio cuenta de que debía actuar para prevenir este peligro. De esta
manera, ahora somos testigos de una campaña conjunta contra “Los
abusos contra los derechos humanos en Cuba”. Incidentes menores son
publicitados como algo grave y promovidos por los medios de
comunicación masiva, principalmente en EE.UU. y Europa. Echemos un
vistazo a algunos de los incidentes acerca de los cuales tanto hemos escuchado.

Está el caso de Orlando Zapata Tamayo, un prisionero en una cárcel
cubana quien murió el 23 de febrero luego de una larga huelga de
hambre. Se proclamó que era un disidente político protestando contra
la dictadura de Castro. De hecho, era un ladronzuelo que había entrado
y salido de la cárcel por numerosas acciones (la más grave de las
cuales fue pegarle a alguien con un machete) ninguna de las cuales fue
en lo más mínimo política. Su huelga de hambre se debió al hecho de
que las autoridades carcelarias se negaron a su pedido de darle un
teléfono celular, una televisión y una cocina en su celda.
Los disidentes aprovecharon su protesta para presentarlo como un
camarada disidente e inclusive consiguieron que Amnistía Internacional
lo declarara como “prisionero de conciencia” Se convirtió en el póster
político en Cuba, especialmente luego de su muerte a pesar de recibir
el mejor cuidado médico disponible.

¿Quiénes son estos disidentes políticos cubanos en cárceles cubanas?
¿No prueba ésto la represión política? Lo que es erróneo en esta
conclusión es que no considera el que han sido apresados no por sus
visiones políticas o por expresar sus opiniones, sino por violar la
ley que prohíbe recibir dinero de parte del gobierno de los EE.UU.
La misma acción en EE.UU. –ser una agente extranjero no registrado- te
llevaría a la cárcel aquí también. (1) Pero cuando en el 2003 Cuba
arrestó, enjuició y sentenció a prisión a 75 disidentes por ser
agentes de un gobierno extranjero quienes juraron derrocar el gobierno
cubano, esto fue presentado por el gobierno de los EE.UU. como una
violación a los derechos humanos. Adjunto un artículo que escribí
sobre este tema en ese momento.

Estos 75 disidentes han regresado a las noticias últimamente. Sus
esposas han realizado marchas pacíficas cada domingo luego de misa
solicitando la liberación de sus esposos. Llamadas las Damas en
Blanco, este pequeño grupo de mujeres caminan en silencio por la
Quinta Avenida en la zona de Miramar en La Habana-
Estas marchas, que han venido ocurriendo casi sin prensa por 7 años,
se han convertido ahora en noticia internacional. Esto es porque
algunos cubanos, furiosos por la campaña mediática contra su país, han
realizado contramarchas para repudiar a las Damas en Blanco. Esto ha
llevado a algunas desagradables confrontaciones  que han sido
retratadas  como serias violaciones a los derechos humanos de parte
del gobierno cubano.

Se pueden ver fotografías de estas confrontaciones en el sitio de
Internet del Miami Herald
http://www.miamiherald.com/2010/03/18/1534853/protesters-punched-dragg
ed.html?asset_id=1535378&asset_type=gallery

Recuerden que este es un periódico hostil a la Revolución Cubana y por
lo tanto va a mostrar las fotos más críticas. Pero si miran
cuidadosamente a lo que parece estar ocurriendo en estas fotos, verán
dos cosas que la policía está haciendo.

1. Están conteniendo a una muchedumbre furiosa, protegiendo así a las
Damas en Blanco. 2. Las están subiendo a un autobús, separándolas de
la escena. Las Damas en Blanco no son arrestadas ni llevadas  a la
cárcel. Son separadas por su propia seguridad y se las libera de modo
que puedan regresar el siguiente domingo para la próxima marcha. No
hay evidencia de brutalidad policíaca. Las Damas ejercen la
resistencia pacífica, cojean de modo que la policía deba llevárselas.
Pero no hay escenas de golpizas, garrotes, gas o táser.

Ahora bien, habiendo practicado la desobediencia civil pacífica, no
puedo sino admirar el coraje silencioso de estas mujeres y su
determinación al enfrentar una muchedumbre hostil. Pero esto no hace
que su causa sea justa. Tampoco hace que su traslado sea una violación
a los derechos humanos. Sin embargo, tal es el modo en que ha sido
presentado a los medios de comunicación internacionales en la campaña
para desacreditar a Cuba.

Entonces ¿por qué el suicidio de este prisionero en Cuba – el único en
muchos años- se convirtió en una noticia de primera plana cuando hay
una mayor cantidad de suicidios de soldados norteamericanos a cada
semana? ¿Por qué las marchas contra los manifestantes en Cuba se
convierten en noticias de primera plana cuando en Honduras los
escuadrones de la muerte están matando a líderes de la oposición al
gobierno de facto (apoyado por EE.UU.)? No es que estos sucesos en
Cuba no deban ser considerados noticia, es la publicidad
desproporcionada de los mismos lo que me preocupa. Sin dudas parecen
ser parte de una campaña para aguar cualquier posibilidad de
acercamiento entre los Estados Unidos y Cuba, desacreditando al
gobierno cubano.

En este relato, Cuba es presentada como intolerante hacia las críticas
y sin voluntad de cambio. La realidad es muy diferente de esta
caricatura. La misma ignora el vivo debate que está ocurriendo en Cuba
en torno a un número de asuntos claves. Pero estos son debates acerca
de cómo mejorar el socialismo, en tanto que lo que los disidentes
parecen estar proponiendo (si es que tienen algún programa) es un
retorno al capitalismo. Es por esto que son apoyados por la mafia de
Miami y el gobierno estadounidense. Por ello también es que no tienen
seguidores reales en Cuba.

Rafael Hernández, editor de Temas, la publicación líder en análisis
social, nos da una útil lista de asuntos reales que son materia de
debate público:

Descentralización; participación y control político efectivo sobre la
burocracia por parte del Poder Popular; Reordenamiento de la economía
y mayor eficiencia de la misma; agrandamiento del sector privado;
ampliamiento de la cooperativización; mejoramiento en el nivel de
ingresos consistentes con el trabajo y la capacidad adquisitiva; fin
de los subsidios y primas generalizadas; nuevas políticas sociales
para los sectores más en riesgo; opinión pública reflejada en los
medios; ampliación de espacios de libre expresión; reforzamiento de
las leyes y el orden constitucional y la democratización de las
instituciones (incluyendo las instituciones políticas) (2)

Esta es la sociedad civil real en Cuba. Está vivita y coleando y no
necesita ningún “reforzamiento” de parte de los Estados Unidos.
Simplemente necesita ser aceptada y librada a su propia cuenta por
nuestro gobierno y sus aliados en Miami, quienes anhelan regresar a
una Cuba neocolonial y capitalista. Para los cubanos, tal opción fue
decisivamente rechazada hace medio siglo.

[traductora Ercilia Sahores]

NOTAS

El Código Penal de los Estados Unidos, bajo su capítulo 115, titulado
“ Traición, Sedición y Actividades Subversivas”, sección 2381,
estipula que cualquier ciudadano norteamericano, quien “adhiera a” o
de “ ayuda y comodidades…dentro de los Estados Unidos u otros sitios”
a un país a quienes los Estados Unidos consideran enemigo, es
“culpable de traición y deberá ser condenado a muerte, o hecho
prisionero por no menos de cinco años y será multado bajo este título
por no menos de $ 10,000”

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