El presidente electo de Chile apenas elegido ayer y ya comenzó atacar a Chávez
Agencias / Aporrea.org, Santiago, 18 enero 2010 – El empresario Sebastián Piñera, elegido ayer como presidente de Chile para los próximos cuatro años, criticó hoy al mandatario de Venezuela, Hugo Chávez, «por la forma en que practica la democracia y por el modelo económico» que aplica en su país.
«Yo tengo muchas diferencias con la forma en que se están manejando los temas públicos en Venezuela y quiero decirlo con mucha claridad», señaló en conferencia de prensa con los medios extranjeros el nuevo presidente electo de Chile.
Piñera, quien ayer derrotó al senador democristiano Eduardo Frei poniendo fin así a dos décadas de gobiernos de la Concertación, explicó que las diferencias con Chávez «son profundas y tienen que ver con la forma en que se concibe y se practica la democracia, el modelo de desarrollo económico y muchas (cosas) más».
«Pero yo también creo en la autodeterminación y en la no intervención en asuntos de otros pueblos», puntualizó.
«En consecuencia -agregó-, vamos a buscar las mejores relaciones en beneficio mutuo con todos los países de América Latina, incluyendo a Venezuela», precisó.
Piñera, quien se definió como de «centro derecha», consideró que en América Latina actualmente hay «un verdadero renacimiento y bonanza de la democracia».
«Prácticamente todos los países de América Latina, con excepción de Cuba, se reencontraron con su democracia en la década de los 80 o de los 90», recordó Piñera, quien aseveró que «dentro de la democracia hay opciones».
«Yo puedo visualizar dos grandes caminos: uno es el que lideran países como Cuba, Venezuela, Nicaragua, Bolivia y tal vez otros, y otro es el que lideran países como México, Brasil, Colombia, Perú y Chile», explicó.
El empresario triunfador de la elección presidencial chilena manifestó su opción por «la democracia con Estado de Derecho; la independencia entre los poderes ejecutivo, legislativo y judicial, el respeto a la libertad de expresión y de prensa, y el respeto a la alternancia en el poder».
«Creo también en la economía social de mercado, que está basada en la iniciativa, el emprendimiento, la innovación de las personas, el funcionamiento correcto de los mercados, la integración y la apertura hacia al mundo», agregó.
También enfatizó su apuesta por «la igualdad de oportunidades, una mayor justicia social y luchar con mayor eficacia contra la pobreza y las desigualdades excesivas que existen en muchos países».
«Por supuesto, hay modos distintos que uno puede vislumbrar en América Latina, pero cada país tiene que escoger su propio camino. Chile escogió el suyo», apostilló.