LOS MAESTROS, CAUSAS Y EFECTOS
Por José Jiménez
En digna representación de resistencia de los trabajadores y el pueblo mexicano, los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) anuncian y están a punto de iniciar una jornada de movilización nacional y lucha, que será diferente a las anteriores que ellos mismos han desarrollado, ya que en esta ocasión no solo se levantarán demandas económicas de incremento salarial y otras prestaciones, van a la defensa y a definir las nuevas condiciones de la relación laboral en la que se tiene mucho que perder.
Como siempre también opinadores de tinta vierten por litros sus comentarios, respetables si son francos, aunque no coincidamos, pero también los hay por mandato de corte mercenario que por monedas están al servicio del mejor postor, lo que reprobamos.
Por ignorancia o por mala intención abra que hacerles frente, escucharlos, analizarlos y anteponerles los argumentos que sustentan la otra parte. Se tiene el legítimo derecho de hacerlo en el debate político ideológico, aunque el otro no lo quiera.
El primer hecho que señalamos es el que coloca al sindicato como organización de los trabajadores de la educación, habrá que reflexionar si los demás sindicatos también, incluidos los que se dicen con posición de izquierda, no están a la altura de las circunstancias y su actuación es inútil.
Se muestra así la necesidad de regenerarlos o de superarlos ya que son utilizados en el modelo del sindicalismo charro tradicional, como instrumentos de sometimiento, suplantación para simular y control férreo.
En este caso la CNTE, que no es el sindicato sino una forma de organización de los trabajadores, ha ocupado y cargado con males que no le corresponden, como el desprestigio de los aviadores y saqueadores, un tintero, los que a veces son útiles, nos dice que con la CNTE no se puede y que en Oaxaca hay por lo menos 10 mil seudoprofesores que no trabajan pero cobran, más se les pensionará algún día.
La CNTE se moviliza oponiéndose a la reforma educativa, a la que se definirá mejor como el primer uso de la reforma laboral, al aplicarles las nuevas condiciones laborales y afectarlos en la estabilidad en el empleo y su trabajo docente.
Acertadamente señalan los maestros que con el desmantelamiento de sus condiciones de trabajo y la pérdida de la seguridad en el empleo se va a un magisterio manso que no cuestione los libros de texto ni los planes y programas de estudio, los que con las reformas del panismo quedaron huecos, con contenidos inútiles para construir un pensamiento crítico.
Sergio Espinal, dirigente del magisterio de la sección 18 de Michoacán, explica que el gobierno federal reducirá la inversión pública que destina al pago de salarios al magisterio, con el modelo laboral que se impone se va a recortar hasta el 50 por ciento del costo de nómina ya que a los maestros de nuevo ingreso al recibir sus plazas a través del concurso nacional, se contrataran como personal eventual por 3 o 6 meses y sin ninguna prestación.
José González Figueroa, maestro integrante del Comité Ejecutivo Nacional Democrático del SNTE, dijo, con un profesorado que trabaja prácticamente a destajo, que se le paga por hora y sin ningún tipo de protección de sus derechos laborales, está condenado al fracaso educativo, él y sus alumnos.
Acompañamos esta movilización del magisterio como lo hemos hecho antes en otros momentos igual de importantes, desde la tribuna o en la toma de la cámara de diputados, en el debate público y en las calles.
Los maestros ahora tienen la oportunidad y se ven obligados a asumir el hecho de que el problema de la educación en México, de por lo menos en los últimos treinta años, debe politizarse para su atención por ser parte esencial del proyecto político nacional.