Perú:
ALAN GARCIA SE DESPIDE ASESINANDO POBLADORES EN PUNO
Hugo van Oordt H.
A escasamente mes y días para que Alan García Pérez deje el turno a Ollanta Humala en la presidencia del Perú, macha nuevamente sus manos de sangre con la muerte de 6 pobladores de la ciudad de Juliaca en el Departamento de Puno, limítrofe con la Republica de Bolivia, cuando policías de la Dirección de Operaciones Especiales dispararon a matar sobre un grupo de pobladores que como medida de presión para que el gobierno anulara la concesión minera a la compañía Santa Ana, intentarán tomar las instalaciones del Aeropuerto Manco Capac en la mencionada ciudad sureña.
El saliente presidente que al parecer pretende postularse nuevamente para 2016, abandona el gobierno con las manos teñidas de sangre, sumando seis muertos más a su larga lista de masacres dentro de las cuales no se pueden olvidar el asesinato impune de más de 300 presos políticos y prisioneros de guerra en tres cárceles limeñas, la masacre amazónica de Bagua y muchos asesinatos más de menor dimensión.
Las muertes se registraron durante el primer día de un paro general de Juliaca, cuando manifestantes llegados en los días previos de Azángaro que reclamaban la descontaminación del río Ramis, la eliminación de la minería informal y la cancelación de las concesiones mineras, intentaron tomar el aeropuerto Manco Cápac.
La tragedia se consumó luego que más de dos mil pobladores de la zona norte de Puno de zona Quechua, a la que pertenece la provincia de Azángaro, intentaran tomar por la fuerza el terminal aéreo. Esta acción fue enmarcada dentro de un paro provincial de 48 horas, acatado por la jurisdicción de San Román, cuya capital es Juliaca, en solidaridad con la protesta de Azángaro.
Se confirmó la muerte de Raúl Canccapa Huaricallo (38), Edwin Félix Yrpanipoca Turpo (20) y Petronila Coa Huanca y más de treinta resultaron heridos, en los violentos incidentes.
Sin embargo, un vecino del lugar, Antonio Campos Huanca (45), quien sólo observaba los enfrentamientos, desde el segundo piso de su casa, también perdió la vida, según confirmó la periodista Zenaida Zea Olivera, que estuvo en el lugar de los hechos. La quinta víctima fue identificada como Gregorio Huamán Mamani, y una sexta, aún no identificada, permanece también en la morgue de Juliaca.
La indignación de la población se dejó sentir en forma inmediata, el incendio de la filial de Córpac (organismo estatal que regula el tráfico aéreo) y de una cadena de farmacias chilenas Inkafarma, obliga al gobierno a dar marcha atrás y anular la concesión minera, como una medida preventiva a nuevos desordenes.
El presidente Regional de Puno, Mauricio Rodríguez, confirmó los avances del diálogo con la Comisión de Alto Nivel, integrada por ministros y viceministros, e instó a los huelguistas a la calma. “Estoy preocupado por esta situación de tensión que vive Puno, producto de la insensibilidad del gobierno central, al haber postergado, por más de cuatro años, la descontaminación del río Ramis. Hemos pedido una serie de medidas de remediación ambiental para este río y que costara 144 millones de soles diversificado en 46 proyectos. También hemos pedido la implementación del decreto de urgencia 028 para que haya una intervención militar a las maquinarias de la minería informal que está operando en Ananea”, detalló la autoridad regional.
Según informaron testigos de la zona, la policía habría actuado en forma desmedida, al reprimir el desborde de la protesta con disparos directos a la cabeza de los manifestantes que habían destrozado la valla perimétrica que protegía el acceso a la pista de aterrizaje. El cuerpo de al menos uno de los muertos fue registrado por las cámaras de televisión de los medios locales que cubrían este luctuoso suceso.
Esto fue corroborado por los médicos forenses de la morgue de Juliaca, que certificaron que los fallecidos registraban impactos de bala en la nuca y la cabeza, lo que demostraría el uso desmedido de la fuerza, por los aproximadamente trescientos efectivos de la división especial de la Dinoes que custodiaban el terminal aéreo.
La indignación por la muerte de seis pobladores en la ciudad de Juliaca despertó la indignación de miles de pobladores de la localidad de Azángaro, quienes rodearon la comisaría en la que se encontraban cinco policías y habrían tomado la unidad y amenazarían con quemarla.
Una fuente policial afirmó anoche que los efectivos cercados en la comisaría de la ciudad solicitaron ayuda en vano, mientras el alto mando militar ordenó replegar al Ejército como medida preventiva.
Los pobladores dieron un plazo al gobierno para solucionar sus demandas de evitar la contaminación de la cuenca del río Ramis y anular las concesiones mineras en Puno, para liberar a los efectivos.
A su turno, el titular del Interior, Miguel Hidalgo, informó que la policía logró retomar el control del aeropuerto de Juliaca y que en Azángaro hubo violentos enfrentamientos, al punto que -anotó- habrían tomado el puesto policial de la localidad.
El Gobierno regional acordó declarar duelo regional los días 25, 26 y 27 de junio del presente año, en el ámbito de la región Puno y en solidaridad a las víctimas y heridos de los lamentables sucesos.
Además se dispone el embanderamiento con el Pabellón Nacional a media asta durante los tres días de duelo. El documento lleva la firma del vicepresidente regional de Puno, Saúl Bermejo Paredes, quien actuó en reemplazo del presidente regional, Mauricio Rodríguez, quien se encuentra en la capital de la República.
El ministro del Interior, Miguel Hidalgo, informó anoche que la policía tiene bajo control el aeropuerto de Juliaca; sin embargo, señaló que hubo serios daños en su infraestructura, tales como el corte de la malla de protección, y en la pista de aterrizaje. Además, los vuelos fueron suspendidos.
Un grupo de pobladores azangarinos que protestan contra la minería informal en la ciudad de Juliaca, lograron ingresar por la tarde al Aeropuerto Internacional Manco Cápac, tras un asedio de varias horas. Inicialmente cortaron el cerco, se enfrentaron a los policías y luego prendieron fuego a una camioneta. Aproximadamente a las siete de la noche, tres unidades vehiculares ardían en llamas en el aeropuerto Manco Cápac. Los pobladores les habían prendido fuego como reacción ante la represión policial y las muertes, según testigos.
La presidenta del Consejo de Ministros, Rosario Fernández, informó que hoy serán publicadas en el diario oficial “El Peruano” cinco normas importantes que dan solución a las demandas de la población de Puno, relacionados con el tema minero. Dijo que dos de las tres mesas de negociaciones ya terminaron su trabajo, con soluciones concretas, y solo queda una tercera mesa, sobre la contaminación del río Ramis, que en cualquier momento arriba a soluciones. La jefa del gabinete exhortó a la población puneña para que regrese a sus casas, y que no se deje llevar por actitudes que generan violencia, ya que no se justifica ningún acto de esta naturaleza, cuando se está en plena negociación, y existe voluntad de diálogo por parte del Ejecutivo.
La Dirección Regional de Salud ha reportado oficialmente una lista de 24 heridos que han sido atendidos hasta el momento en el hospital y las clínicas de la Ciudad Calcetera, el número ascendería a 40.
1. Luis Antonio Jarata Aguirre (16) 2. Tito Parque 3. Viviana Cahua Cori 4. Gregorio Humpire Apaza 5. Victoria Pérez Zanabria 6. Susana Tito Parque 7. Rene Mamani Quispe (47) 8. Pedro Pacheco Yana (38) 9. Pablo Jesús Mamani Leonardo ( 61) 10. Gumercindo Ventura de la Cruz 11. Angel Aguilar Ortiz (39) 12. Rogelio Coa Alvarez 13. Fortunato Pari Pari (43) 14. Eulogio Cayo Quispe (26) 15. Alida Quispe 16. María Quispe 17. Constantino Calsin Machaca 18. Wilber Aracayo 19. Hugo Huanca (23) 20. Jorge Luis Mamani Mamani (19) 21. Daniel flores Vilca (61) 22. Bacilio Quilca Gutiérrez (68) 23. Huber García Huahuasonco (32) 24. Alberta Charca de Tite (55).